Hemos recibido un email y con ello incitamos a que la gente nos mande emails para colaborar con nuestro blog.
"Me gustaría participar en su blog con un comentario grafológico que tuve
que hacer como examen de la carta de Jack El Destripado."
Lucía
Herguedas Verdía
Examen
número siete.
From hell.
Mr Lusk,
Sor [Sir]
I send you half the Kidne I took from one woman and prasarved it for you tother piece I fried and ate it was very nise. I may send you the bloody knif that took it out if you only wate a whil longer
Mr Lusk,
Sor [Sir]
I send you half the Kidne I took from one woman and prasarved it for you tother piece I fried and ate it was very nise. I may send you the bloody knif that took it out if you only wate a whil longer
signed
Catch me when you can Mishter Lusk
Catch me when you can Mishter Lusk
Traduccion:
"Desde el infierno. Señor Lusk. Señor le adjunto la mitad
de un riñón que tomé de una mujer y que he conservado para usted, la otra parte
la freí y me la comí, estaba muy rica. Puedo enviarle el cuchillo ensangrentado
con que se extrajo, si se espera usted un poco. Firmado, Atrápeme si puede
Señor Lusk."
•
Forma: Angulosa. En las letras y en su
unión entre ellas donde debería haber curvas hay ángulos. Los sujetos con este
tipo de escritura tienden a la intransigencia, a la frialdad, irritabilidad,
agresividad. Con una gran terquedad y obstinación, tienen una faceta combativa
y muy vengativa, enlazada con la falta de flexibilidad y la dureza, capacidad
de mando y sentido de la disciplina
•
Tamaño: Los óvalos de este texto tienen presencia de sobrealzamiento: tienen
una altura desproporcionada en relación a su ancho. Son muy altas y estrechas.
Es signo de un sentimiento de autoimportancia e inflación del yo (que pueden
ocultar un complejo de inferioridad), de orgullo y soberbia, de una educación
basada en el "buen nombre" y los modales aristocráticos. Junto a la
presencia de la barra de "t" alta indica un sujeto con dotes de
mando, con vanidad muy sensible a la estima ajena y con gran necesidad de
independencia. Ambición. Los óvalos muy estrechos indican exceso de cautela y
de precauciones. Usa la fuerza instintiva para protegerse y defenderse en lugar
de usarla para conseguir sus metas. Falta de espontaneidad. Calculación
mezquina y egoísta.
Aspiraciones
intelectuales, idealistas y místicas, mezcladas con ideas románticas e
imaginación desordenada. Búsqueda de prestigio.
Tendencia
a la actitud paranoide. Es un delirio que en apariencia tiene una lógica
perfecta. Exagerada susceptibilidad. Desconfianza.
Esta
escritura sobrealzada se combina con el fenómeno del decrecimiento. Hay
numerosas palabras en el texto que sufren un decrecimiento progresivo de sus
letras conforme están hacia el final de la palabra. Es típico de espíritus
sensibles, penetrantes, discretos. Signo de desconfianza, astucia escondida
tras la mentira, espíritu calculador. Tiene facilidad para captar los móbiles
ajenos, las preocupaciones y debilidades de los demás. Juega con ellos y los
manipula, y lo consigue creando una falsa imagen de sí mismo de comprensión y
finura. Usa verdaderamente esa comprensión, esa capacidad para ponerse en lugar
de otro para conocer su forma de ser y actuar desde la lejanía, huyendo de las
relaciones íntimas que "lo enganchen". Así es como capta sus
necesidades y sus móviles para manipularlos, sin que ellos sean cómo es
realmente su verdadera personalidad.
Facilidad
para focalizar la atención en los detalles. En un contexto negativo como este
indica también su debilidad, su inconsistencia.
Es
una escritura que se prolonga hacia arriba pero también hacia abajo, con unas
grandes jambas estrechas y angulosas. Esta combinación es muestra de un
sentimiento intenso de inferioridad, de un sujeto descentrado con ambición a
tener aspiraciones, pero incapaz de llevarlas a cabo. Indica también
instisfacción, hiperactividad psíquica y motriz, falta de concentración (y a
veces de equilibrio mental).
Es
en general una escritura de tamaño grande. Es propia de la necesidad de
afirmación, una fuerte emotividad e imaginación. En este contexto negativo es
también signo de orgullo, de necesidad de llamar la atención y necesidad de
representación. Soberbia, prepotencia.
Orgullo. Falta de realismo. Junto con la fuerte presión indica impulsividad,
desorden, orgullo, e incluso desequilibrio.
Las
mayúsculas son desproporcionadas en relación al tamaño de las minúculas, lo que
es la huella de la sobreestimación de la propia importancia, el yo se agranda
con el contraste ventajoso respecto a los demás.
•
Gestos tipo: Predominio de "a" minúscula de óvalo abierto, típica de un
sujeto con poca facilidad para guardar los secretos y buena capacidad para
exponer las cosas de forma sugestiva.
"B"
minúscula con la prolongación en forma de anillo, que indica la presencia de
habilidades y actitudes estudiadas, calculadas, y que a pesar de no tener mucha
cultura crea una imagen de superioridad sobre los demás que hace pensar que es
individuo de excelsos conocimientos.
"C"
minúscula inicial de palabra con una espiral interior en la zona superior, que
muestra el deseo de llamar la atención,
egoísmo unido al egocentrismo y el narcisismo, coquetería, falta de lealtad e
hipocresía.
"G"
minúscula de jamba larga, estrecha y angulosa. Índice de grandes impulsos
sexuales mal controlados.
Punto
de la "i" muy alto, indicando un afán de evadirse huyendo de la
realidad, y ánimo de recrearse creando proyectos, que son más poéticos que
objetivos.
"K"
mayúscula y minúscula en forma de "R".
"L"
mayúscula sobrealzada y con bucles, casi con forma de "s": Indica una
búsqueda de mérito personal y la afición a aislarse en el mundo de las propias
teorías. Deseo de llegar a objetos muy elevados.
"M"
minúscula y mayúscula con el primer arco más alto que los demás, signo de un
individuo con una valoración superior del yo frente a los demás factores de las
circunstancias.
"N"
minúscula alargada y angulosa, que es propia de los individuos imaginativos,
intuitivos, sugestionables y extravagantes. Muy sensible y desigual en sus
costumbres. Su criterio, aunque puede parecer un poco extraño, tiene su lógica.
Letra
"o" con doble óvalo, que muestra un carácter dado a las ambigüedades,
gusto por los artificios verbales y con capacidad para hacer creer a los demás
lo que le interesa. Es el rizo de la mitomanía.
"S"
minúscula cuyo rasgo terminal inferior se proyecta hacia la izquierda, que
muestra una íntima vinculación con el pasado, interés por lo pasado y la
historia.
Barra
de la T a la derecha del palo, alta y ascendente: Persona con mucho ardor,
combativa y agresiva, impulsiva, con la voluntad de imponerse metas pero incapaz
de alcanzarlas. Impaciencia, voluntad frenada por el nerviosismo y la
desorientación. Imprudencia, rechazo a las enseñanzas de la experiencia.
Es
una barra muy larga, signo de voluntad de dominio, afán de mando. Facilidad
para caer en el delirio, víctima de sus propias ambiciones.
Letra
"u" minúscula con un rasgo final en forma de gancho que indica un
afán de acaparar, una gran envidia cuando otras personas de su ambiente
destacan por encima de él.
Jamba
de la "y" alargada e inflada: Despreocupación moral. Las jambas muy
grandes en general son signo de deseo de exhibirse para ocultar la debilidad
del individuo, algún defecto o carencia. Valoración subjetiva de la realidad y
del yo. Los instintos y lo inconsciente es lo que guían sus actos.
Hay
bucles innecesarios: "h" en the del tercer renglón, "f" de from en el cuarto,
palo de "p" en el cuarto, en todas las "o" y "s"
minúsculas y la "a" de can en la penúltima línea, en signed,
en la h de misther. Indican egoísmo, oportunismo, hipocresía y una
amabilidad calculada. Cuando se muestra cortés hacia los demás es por un
sentido de la conveniencia, por lo que pueda ganar con ello. Es también exceso
de imaginación y visión subjetiva de la realidad con pensamientos delirantes.
Fuerte
presencia del llamado diente de jabalí (prolongación hacia fuera y
arriba de los trazos finales de las palabras). Podemos observarlo en from,
hell, Lusk, send, you, the, kidne, took,
women, and, fate, can. Junto con la presión fuerte y empastada es signo de
instintos violentos y agresivos, maldad y crueldad que van dirigidos hacia el
entorno, carácter dificil dispuesto a contrariar y voluntad deliberada de hacer
sufrir.
•
Velocidad: El tamaño grande, los rasgos angulosos, la presión fuerte y a veces
desigual, la cohesión fragmentada (unas letras unidas a las siguientes y otras
no) nos hablan de una escritura lenta. A
pesar de que la inclinación de las letras es hacia la derecha y los renglones
no son totalmente horizontales, rasgos que nos hablan de la velocidad de la
escritura, estos se deben más bien a las características psicológicas del inviduo, y no se deben tanto
a la velocidad de los trazos. La lentitud unida a los rasgos angulosos, la
inhibición y la monotonía indican una mente indolente, pesada, con falta de
juicio e incluso obtusa, indiferente, terca, hosca y con tendencia al disimulo,
a la reserva y la discreción. También es una mente con prudencia, reflexión y
paciencia, pereza, indecisión, vacilación, falta de espontaneidad y
calculadora.
•
Presión: Desigual a lo largo del texto, pero muy marcada y fuerte en las líneas
del centro, más débil en las primeras y las últimas, y también varía dentro de
la misma palabra, con tendencia a la presión floja en las jambas y trazos
finales. Tal vez en las últimas líneas la delgadez de los trazos se deba a que
el útil escritural tenía poca tinta.
Es
la llamada escritura fusiforme, donde la presión unas veces es fuerte y otras
débil, que habla de un individuo con inconstancia en las empresas, aunque tenga
una capacidad para desarrollarlas. Desorden de ideas. Si la presión es muy
fuerte, como en este caso, es signo de inteligencia práctica, crítica y
discriminatoria. Junto con la forma angulosa expresa actitud rígida,
intransigente, con dificultad parar reconocer los propios errores aunque se le
muestren pruebas evidentes. Falta de sensibilidad para entender los
sentimientos de los demás y el dolor
ajeno.
•
Inclinación: Hacia la derecha, de forma más acusada en las últimas líneas del
texto. Propia de mentes impresionables y
sugestionables, y sí además la letra es rígida y angulosa indica un individuo
con arrebatos y desbordamientos impulsivos frecuentes. Falta de mesura,
desenfreno, dispersión e insensatez.
•
Dirección: Las líneas tienen a ascender, pero la base de las palabras es sinuosa:
las letras no se apoyan en la base a la misma altura, unas están más arriba que
otras. Las líneas ascendentes y sinuosas suelen ser típicas de escritores con
necesidad de iniciativa, ardor, entusiasmo, optimismo, ambición, pero también
inconsistencia, astucia unida a un carácter huidizo, falta de responsabilidad y
compromiso, y un ánimo muy variable e influenciable. La sinuosidad es muestra
de cansancio y debilidad, a veces hasta de mentira y disimulo.
•
Cohesión: Aunque la mayoría de las letras están enlazadas, hay grupos de ellas que
no lo están. Es una búsqueda de equilibrio entre la intuición y la lógica,
entre el contacto y la introversión (temor al contacto pero a veces deseo de
él), altibajos en las relaciones, desconfianza que le lleva a la actitud defensiva.
Temor a mostrarse tal y como es, creando un yo falso ante la sociedad, mientras
que en la intimidad trasluce el verdadero yo. Signo de inteligencia, buena
memoria, agilidad mental y gran imaginación. Algunas mayúsculas aparecen unidas
a la minúscula que le sigue, y otras no. Esto reitera el hecho de que es un
sujeto con emociones contradictorias existentes al mismo tiempo. Unas veces es
sociable y otras veces se aparta de los contactos, con poca unidad ideológica
pero con buena sutileza.
•
Orden: Se denomina escritura confusa a
aquella que, como esta, tiene unas jambas tan desmesuradas que invaden las
líneas siguientes. Es indice de una persona que se implica mucho en lo que vive
y pierde de vista sus objetivos. No tiene ideas claras sobre lo que quiere hacer,
ni sobre sí mismo, con problemas de identidad. Indica también fuerte ansiedad,
confusión, agitación, un espíritu desordenado y perezoso, con un juicio
oscurecido o por la debilidad del discernimiento o debido a una fuerte
ansiedad.
Además
es una escritura compacta, con poco espacio entre renglones y palabras, que es
huella de desconfianza y una falsa actividad. El escribiente se siente atacado,
ya sea por el entorno o las personas, y reacciona defendiéndose, encerrándose y replegándose en
sí mismo. Signo de que intenta aprovechar al máximo su energía, y dificultad
para acabar lo que empieza y para acabar los conflictos.
El
margen superior está casi ausente, la primera línea del texto lo ocupa. Los
escritores que tienden a olvidarse del margen superior tienen una falta de
consideración hacia los demás, invadiendo las esferas ajenas.
El
margen inferior es amplio, pero parece deberse más bien a las exigencias del
texto (que acaba ahí, y por tanto ese espacio está libre porque no hay con qué
ocuparlo), con lo cual nos abstenemos de darle un significado simbólico.
El
margen derecho es inexistente, ocupa todo el espacio de la página hasta el
final. Indica irreflexión, impulsividad, indiscreción. Lo mismo sucede con el
izquierdo, lo que indica acaparamiento y avaricia, desconfianza que le provoca
un repliegue en sí mismo, y dependencia del pasado y de los recuerdos.
Podríamos
decir por tanto, sin contar con el margen inferior, que se trata de una
escritura invasora, sin márgenes, lo que es propio de sujetos desbordantes, que
invaden la esfera e intimidad de los demás, irrespetuosos, angustiados y
obsesivos, proclives a los grandes derroches, excesivos, demostrativos e
incapaces de ponerse límites. Tiene ansia por controlar el espacio como defensa
contra la fatalidad y lo que no está bajo su control.
Es,
en fin, una escritura inarmónica, debido a las desproporciones de las jambas,
que provocan confusiones entre los renglones, ausente de márgenes y poco
espacio entre palabras y líneas.
CONCLUSIONES
Se
trata de un sujeto cuyas actitudes defensivas hacia el entorno se deben a su
inseguridad, al temor por lo que no puede controlar y los imprevistos, lo que
le provoca una mala capacidad de adaptación e improvisación. Se defiende
replegándose sobre sí mismo, huyendo del contacto con los demás, de las
responsabilidades y preocupaciones que le puedan provocar las relaciones
sociales íntimas y de amistad. A pesar de su introversión y su miedo, es
inestable en el sentido de que unas veces se repliega y otras veces busca el
contacto con otras personas. La relación con los demás es por mero interés, ya
que cuenta con una gran capacidad de oportunismo. Cuando busca ese contacto, no
es por necesidad de él, sino porque capta algún beneficio u oportunidad en
ello. A la hora de contactar con otras personas crea una falsa imagen de sí
mismo para esconder su interioridad, sus miedos y debilidades, llegando a
engañar a los demás y a sí mismo con una falsa imagen de superioridad sobre los
demás, que en realidad oculta un complejo de inferioridad del que el sujeto no
es consciente. Tiene facilidad para captar los móbiles ajenos, las
preocupaciones y debilidades de los demás. Juega con ellos y los manipula, y lo
consigue creando una falsa imagen de sí mismo de comprensión y finura. Usa
verdaderamente esa comprensión, esa capacidad para ponerse en lugar de otro
para conocer su forma de ser y actuar desde la lejanía, huyendo de las
relaciones íntimas que "lo enganchen". Su amabilidad y cortesía son
falsas, mera apariencia para ganarse la confianza del otro y poder llegar a manipularlo tras conocer sus
móbiles, preocupaciones y debilidades. Así es como capta sus necesidades y sus
móviles para manipularlos, sin que ellos sean cómo es realmente su verdadera
personalidad.
Sus
miedos, debilidades e inseguridades los esconde y trata de compensarlos
mediante una actitud de intransigencia,
frialdad. Tiende a la irritabilidad que puede acabar en numerosas
ocasiones en la agresividad. Con una
gran terquedad y obstinación, tienen una faceta combativa y muy vengativa,
enlazada con la falta de flexibilidad y la dureza, capacidad de mando y sentido
de la disciplina. El complejo de inferioridad en su inconsciente se tapa con
una faceta de orgullo y soberbia, y una gran vanidad y ambición.
Destaca
por su afán de evadirse huyendo de la realidad, y ánimo de recrearse creando
proyectos, que son más poéticos que objetivos, y su búsqueda de mérito personal
y deseo de llegar a objetos muy elevados. Tiene una necesidad de iniciativa,
ardor, entusiasmo, optimismo, ambición, pero también inconsistencia, y astucia
unida a un carácter huidizo, falta de responsabilidad y compromiso, y un ánimo
muy variable e influenciable. Por eso,
pesar de esa ambición, ese gusto por crearse empresas nuevas y metas,
tiene dificultad a la hora de acabarlas
aunque tenga una gran capacidad para realizarlas. Usa la fuerza instintiva para
protegerse y defenderse en lugar de usarla para conseguir sus metas. Esto se
debe a que es un invididuo con gran confusión. Se implica mucho en lo que vive
y pierde de vista sus objetivos. No tiene ideas claras sobre lo que quiere
hacer, ni sobre sí mismo, y tiene problemas de identidad, confusión, agitación,
un espíritu desordenado y perezoso, con un juicio oscurecido o por la debilidad
del discernimiento o debido a una fuerte ansiedad.
Tiene
una gran necesidad de llamar la atención y de representación, un deseo de
exhibirse para ocultar la debilidad del individuo, algún defecto o carencia,
que sería ese complejo de inferioridad. Su afán de acaparar le provoca una gran
envidia cuando otras personas de su ambiente destacan por encima de él.
Su
forma de actuar se basa en una educación basada en el "buen nombre" y
los modales aristocráticos, de ahí que busque el reconocimiento social y tenga
una gran ansiedad por destacarse por encima de los demás. Tiene un gran interés
por lo pasado, por la historia, y está muy apegado a sus recuerdos. Por otro
lado, su inseguridad le hace temer las incertezas del futuro y tiene miedo de
no ser capaz de superar los obstáculos que se le presentan en el camino. Esto
le obliga a ser prudente, desconfiado con el entorno y también con las
personas, exceso de cautela y de precauciones, calculador, oportunista y a la
vez paciente, dejando pasar las circunstancias desfavorables para dejar paso a
las situaciones que le puedan ofrecer algún beneficio u oportunidad. eA pesar
de ese miedo por las incertidumbres del futuro, no es capaz de aprender de sus
propias experiencias y aplicar esas enseñanzas a las nuevas situaciones. No
reconoce sus errores ni aunque se le muestren pruebas indudables de sus malas
experiencias.
Es un individuo
imaginativo, intuitivo, sugestionable y extravagante, con un carácter dado a
las ambigüedades, gusto por los artificios verbales y con capacidad para hacer
creer a los demás lo que le interesa. Con aspiraciones intelectuales,
idealistas y místicas, mezcla ideas románticas e imaginación desordenada. Tiene
poca facilidad para guardar los secretos y buena capacidad para exponer las
cosas de forma sugestiva. Su inteligencia es práctica, crítica y
discriminatoria, con buena memoria y agilidad mental
Sobresale su tendencia a la actitud paranoide. Es un
delirio que en apariencia tiene una lógica perfecta, unido a un afán de
evadirse huyendo de la realidad, y ánimo de recrearse creando proyectos, que
son más poéticos que objetivos. Es proclive a caer en el delirio, víctima de
sus propias ambiciones. Esto se une a una búsqueda de mérito personal y a la
afición a aislarse en el mundo de las propias teorías. Su exceso de imaginación y visión subjetiva
de la realidad le llevan a pensamientos delirantes. Su mente es indolente,
pesada, con falta de juicio e incluso obtusa, indiferente, terca, hosca y con
tendencia al disimulo, a la reserva y la discreción. También es una mente con
prudencia, reflexión y paciencia, pereza, indecisión, vacilación, falta de
espontaneidad y calculadora.
Los instintos y lo inconsciente es lo que guían sus actos.
Tiende a dejarse llevar por sus impulsos, y sus estallidos de irritabilidad y
agresividad son frecuentes. Está descontrolado porque no se pone límites a sí
mismo. Con una mente impresionable y sugestionable, es un individuo con
arrebatos y desbordamientos impulsivos frecuentes, falta de mesura, desenfreno,
dispersión e insensatez. Su necesidad de afirmación, la fuerte emotividad e
imaginación, el orgullo, la necesidad de
llamar la atención y de representación, su soberbia, su prepotencia, la falta
de realismo pueden ser los precursores de esos estallidos de ira e
impulsividad, que lo llevan al desorden, a la inestabilidad e impredicibilidad,
e incluso al desequilibrio. Es un sujeto con emociones contradictorias
existentes al mismo tiempo.
A pesar de no tener mucha cultura crea una imagen de
superioridad sobre los demás que hace pensar que es individuo de excelsos
conocimientos.
Es
una persona con gran sentimentalismo. Depende mucho de la opinión que los demás
tienen de él, de ahí su inseguridad y su introversión. Por eso teme dejarse ver
tal y como es, con sus complejos e inferioridades (y de ahí que cree esa falsa
imagen de superioridad y seguridad). Ese perpetuo aparentar delante de los
otros le provoca ansiedad y nerviosismo. Se acaba creyendo su propia mentira,
su careta de superioridad, orgullo y vanidad. Busca de forma continua el reconocimiento,
el llamar la atención, el acaparamiento como formas de suplir su inseguridad,
su complejo de inferioridad y como manera de autocomplacerse con una buena
opinión de los demás, por dejarlos sorprendidos, hechizados y encantados hasta
que llegan a confiar en él y en su falsa imagen.
Muy
centrado en sí mismo, es egocéntrico,
con tendencia al narcisismo, despreocupación moral, la coquetería, falta de
lealtad e hipocresía. Tiene una valoración superior del yo frente a los demás
factores de las circunstancias. Resaltan en él el egoísmo, el oportunismo,
hipocresía y una amabilidad calculada. Cuando se muestra cortés hacia los demás
es por un sentido de la conveniencia, por lo que pueda ganar con ello. Su
astucia está escondida tras la mentira,
y también su espíritu calculador, interesado y oportunista. Además de
instintos violentos y agresivos, tiene una maldad y crueldad que van dirigidos
hacia el entorno, y un carácter dificil dispuesto a contrariar y voluntad
deliberada de hacer sufrir, con falta de sensibilidad para entender los
sentimientos de los demás y el dolor
ajeno y falta de consideración hacia los
demás, invadiendo las esferas ajenas.
Sus
impulsos y agresividad se extienden hacia su sexualidad: impulsos sexuales mal controlados.
Es,
en fin, un individuo proclive a las mentiras, al disimulo, hipocresía y visión
subjetiva de la realidad para ocultar todo su mundo interior, y para poder ver
las cosas según su conveniencia, de forma que hasta llega a engañarse a sí
mismo. Llega a la mitomanía para crear todo un yo imaginario bajo el que se
esconde su verdadera cara.
Artículo de:
Lucía
Herguedas Verdía
Saludos
ANTUD
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